La acción sin pasión es como una persona sin alma.
Solo existe una forma que en los momentos duros sigas adelante, poner el corazón y pasión a lo que hagas. Es decir, enamorarte, apasionarte con lo que hagas.
La pasión es eso que nos hace existir, eso que nos motiva a hacer algo.
No es cuestión de talento, sino de atreverse. Eso significa lanzarte y dejar aquellas cosas que no amas y que haces sólo por dinero.
Si lo que haces no te apasiona no tiene ningún sentido, no lo vas a hacer bien.
La pasión hace que perseveres, que pase lo que pase tengas mucha más fuerza para llegar al destino propuesto. La única manera de superar los obstáculos que vas a encontrar en el camino es amando lo que hagas.
La pasión por lo que haces te hará entender que
los límites son mentales.
los límites son mentales.
Muy buena reflexión David. Afectuosos abrazos.
ResponderEliminar