A menudo perdemos horas, días, años, y hasta una vida, perdiendo preciosos momentos, sólo porque nos olvidamos de perdonar.
El rencor, el orgullo y el ego son cargas demasiado pesadas.
El perdón te hace libre. Y sólo a través del perdón se pueden restaurar las relaciones más importantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios dan vida a un blog.